Hola, Reader.

La confianza es la base de cualquier interacción profesional. Para que un cliente nos contrate o nos compre, es fundamental que sienta que vamos a cumplir lo que prometemos. Que vamos a hacer lo que le estamos diciendo que vamos a hacer.

Si no le transmitimos esta sensación, la relación no avanzará: no habrá proyecto compartido.

Reforzar la relación de confianza no se basa en repetir eslogans bonitos, sino en demostrar valor.

Comparto contigo este modelo para construir confianza en tres etapas. El modelo está diseñado para consultoras, pero me parece aplicable a otros ámbitos profesionales.

Las tres etapas son éstas:

Primero: Dejar muy claro al / a la cliente cuál es el valor que aportamos

No es lo mismo decir "Te convertirás en un autora de exito" que decir "Te ayudo a pulir tu mansucrito, a preparar una propuesta convincente y a identificar la mejor editorial para tu libro".

Segundo: Demostrarlo

Presenta pruebas. Muestra que sabes de qué hablas. Puedes aportar testimonios de clientes. Me siento muy orgullosa de que Salva Rubio, uno de los lectores que me brindó su testimonio para Marketing para escritores sea finalista a los premios Planeta de este año.

Tercero: Ayuda al cliente a resolver sus dudas

Llegados aquí, la clienta no duda de ti: duda de ella. ¿Ha escogido la mejor opción? ¿Funcionará en su caso concreto? Es el momento de ponernos a su disposición y resolver todas las dudas que surjan.

Siguiendo estas tres etapas vamos reforzando gradualmente la relación de confianza con nuestro cliente y eso nos viene bien a ambos. Personalmente valoro que mis clientes confíen en mí y que yo confíe en ellos. Cuando el binomio se da, los proyectos avanzan mejor y llegan más lejos.

Como señala el artículo, en un mundo que la IA ha saturado de ofertas, la confianza es el último diferenciador que nos queda.

¿Cómo construyes tú la confianza con tus clientes o con tus lectores? Cuéntamelo respondiendo a este mensaje.

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