Hola, Reader.

La semana pasada te hablaba de cómo podemos vencer la resistencia que nos frena a la hora de iniciar o avanzar con un proyecto: la detectamos, la ignoramos, actuamos.

De vuelta me escribió un suscriptor, Arfaxad Soriano, y compartió conmigo su método. Me llamó la atención, lo probé, también me funcionó y, con su permiso, te lo cuento.

El método de Arfaxad

Esto fue, literalmente, lo que me escribió:

Yo me hice la siguiente frase: puedo hacer todo en 15 minutos.

Me ayuda porque así le quito lo complicado a cualquier tarea.

Porque, entonces, cualquier momento del día es adecuado para comenzar o recomenzar.

Porque las interrupciones no me enojan.

Porque ya no estoy acorralado por las prisas cotidianas.

Y ¿En verdad puedo hacer todo en 15 minutos? No, pero así puedo distraer al reloj.

El método, en la práctica

La propuesta de Arfaxad me pilló en un momento en que tenía que comenzar una lectura algo densa, que necesito como información de contexto para un próximo curso. El libro se me había atragantado, a mí, que soy una lectora empedernida. No entendía el porqué de la resistencia y no conseguía ignorarla.

Entonces me dije: "Vale. Puedo leerlo en quince minutos".

Y comencé.

Tal cual.

Está claro que en un cuarto de hora no terminé el libro: entre la densidad del texto y la toma de notas, me llevará un tiempo.

Lo que sí te digo es que la frase "Puedo hacerlo en quince minutos" me desbloqueó.

Si la pruebas, cuéntame cómo te ha ido.

Y gracias otra vez, Arfaxad, por compartirla.

Nos leemos,

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